Orígenes de Florencia.

La primera Florencia (Firenze) tiene orígenes etruscos, pero la auténtica ciudad fue fundada por los romanos, según algunos con fecha 59 a.C. por tropas de Julio César; para otros en época de Augusto.

Sin importar quién la fundara, lo cierto es que el nombre que se le dio fue Florentia.

Distintas hipótesis son válidas, pero todas dejan de lado una antigua leyenda con el sabor de poemas homéricos y que ve un gran rey en la historia de la ciudad: el rey Fiorino.

Míticamente era un noble ciudadano romano de la familia de los Floracchi, que participó en la guerra contra Fiesole, ciudad en la que sus ciudadanos se habían recluido dentro de sus murallas y por seis años resistieron el asedio de las tropas romanas.

Al final del sexto año, las tropas romanas se retiraron, con excepción de Fiorino, quién quedó solo bajo las murallas.

Una noche, los fiesolanos lo atacaron de sorpresa y el soldado encontró la muerte sobre un prado de lirios, que se tornaron rojos por la sangre del héroe.

Lo cierto es que hasta el día de hoy, tanto la bandera y el escudo de Florencia ostentan la flor de lis roja; símbolo que se multiplica por toda la ciudad y se refleja en el arte en formas diversas. 

Marzocco, Piazza della Signoria (Donatello, aprox. 1419-1420):
león con escudo de armas de la ciudad, simboliza el orgulloso carácter florentino.

Incluso el plano del "Duomo", es decir, la Catedral de Florencia, Santa Maria del Fiore, probablemente se encuentra basado en la forma de la flor de lis.